Valentia Fosca nace!


Al lector:

No es menester querer promover una actividad tan poco lucrativa y didactica como la escritura. Lo hacemos como última voluntad. Antes de que todos acabemos carbonizados por la mugre que habita en la capital del Turia. Como huímos de ella en pos de un bienestar fetén, no vemos mejor elección que antrincherarnos en la red y ser profanos en nuestra tierra. A través de nuestros personajes crearemos un submundo oculto. Carecemos de mala voluntad; pero no somos testigos mudos, más bien somos declarantes que denuncian su malestar. Somos un poco hijos de puta.



martes, 13 de octubre de 2009

Elmir J. Siniestro.

Inflexión parte II. Europa ya no resiste.



No.


Así de seco y hueco sonó . La de la falda azul giró su cabeza y se dirigió hacia el piso de arriba. Allí acudí . No para seguir a la de la falda azul, sino para descargar el líquido ingerido durante toda la noche.

Las escaleras desembocan en una zona que sirve de entrada a un área repleta de mesas y taburetes “mini” donde la gente puede compartir ( supongo ) sus conocimientos y experiencias entre el estruendo musical . Rotando tu cuerpo ciento ochenta grados y comunicando al mismo tiempo a tu tronco que ya puede seguir a tus piernas, te adentras al pasillo cuya desembocadura se divide en dos vertientes: a la derecha el cuarto de baño y a la izquierda la región donde acuden los triunfadores sexuales.

El cuarto de baño está repleto de personajes variopintos que no desprenden precisamente un estado saludable. Los rostros de los personajes que acuden al baño a esas horas tienen una perspectiva diferente. Es una perspectiva oblicua que se funde en un pozo aparentemente sin fondo. Allí conozco a un tal “Joselu” que me ofrece cristal a muy buen precio, pero mis ansias de orinar podían frente a la exquisitez química. La muchedumbre allí acoplada y en fila como esperando un gran acontecimiento no daba opción a desintoxicar mi intestino delgado, pues Joselu parecía estar teniendo una buena noche y su centro de operaciones radicaba precisamente en el aseo del féretro. Me desplacé hacia un lado para dejar pasar al rebaño de individuos que salían del servicio como si se tratase de una reunión secreta prohibida por la Ertzanta. Conseguí vislumbrar ese escenario obsceno que se recrea en uno de los rincones más singulares ( sin contar aquel mini espacio que poseía el “Nou Pernil Dolç” ) que contiene la ciudad del Turia . Es el espacio donde suben los que tienen poco que dialogar y mucho que degustar. Está repleto de parejas que en grupo, comparten su amor utilizando el gran sofá que allí se aposenta y que tiene forma de “u”. En él consiguen adornarse así mismos con su amor erótico y de paso, ver al mismo tiempo como los demás hacen lo idéntico y quizá ( ¿por qué no? ), competir en una emocionante carrera en la que el ganador será la pareja que complete su peripecia sexual introductoria y pase por fin, al peldaño siguiente que se sitúa detrás de todo empecinamiento genital: la fornicación. Parecen Dionisos desesperados en una ambición apocalíptica del deseo carnal, ya que besan, acarician y tocan con tal brutalidad, que parece que el holocausto final está cerca y que el tiempo corre en su contra, pues el deseo despiadado con esa furia sólo puede tener su origen en los antiguos griegos , quienes ( supongo ) se sentirán pioneros ( desde donde sea que estén ) de tal trifulca hormonal. Yo me sentiría pionero, no sé ellos.

Lo consigo. Me he arrastrado entre ese olor incómodo y sórdido del baño. He cogido fuerzas y las he puesto dirección hacia la salida. Sergi se debe haber ido con aquella chica. O lo que es lo mismo: soledad y destierro ahora que nadie me respalda.

Las casualidades de la vida provocan que exista alguien como Pastor Migra.

Y despierta Roma. Se ha parado la música. Cae el soldado a manos de un gigante vestido de traje que ha aparecido de forma fugaz del fondo tenebroso y burbujeante. El gigante con mirada evasiva y sin apenas molestar, fabrica un gesto arqueando las cejas que se transforma por reciprocidad en un ligero zig-zageo que a su vez, recae en la parte inferior del cuello. El proceso finaliza en una delicada sonrisa que trasmite respeto. Modera sus movimientos y agudiza la mirada por si alguien escupe al “dj”. Brazos sobre la cintura, cabeza erguida y espalda de acero. Controla todo y a todos. Incluso tiene tiempo de echar una ojeada a la jovencita que está cogiendo el bolso. Vuelve a mirar al centro de la pista. Y ahora si. Brazo extendido, mirada asesina y don dictatorial: TODOS FUERA.

Las casualidades de la vida provocan que exista alguien como Pastor Migra.

No veo. No veo nada. Mierda: el Sol. Me acomodo en la pared en la que la sombra ya ha hecho acto de presencia y allí medito.

Las casualidades de la vida provocan que haya recibido un mensaje de Pastor Migra.

En él pone: RAYA BLANCA, Mejor, lo pone con espacio entre cada letra, asi: R A Y A B L A N C A. Y en mayúsculas. Eso significa que Pastor se encuentra en uno de los mayores antros de esta ciudad situado en las profundidades de un barrio con historia como el de Ruzafa: El Raya Blanca.

Cuando por fin soy consciente de que mi espíritu me acompaña, asumo la pérdida de tiempo ( o no ) que ha significado haber sobrepasado el punto de inflexión de la noche. No hay más. Lo intenté.

Puedo observar a unos erasmus que acaban de salir del féretro. Ahí están, riéndose y disfrutando del placer nocturno del coraje mediterráneo. Cómo disfrutan los europeos de nuestra forma de vida. Quien lo diría . Me gustaría ver la cara de aquellos que defendían a principios del siglo pasado eso de “Que vientos o ventarrones de Europa despierten al pueblo español de su ignorancia...” .Nada, puta mierda. Si es Europa quien se quiere españolizar. Cómo disfrutan. Y si además conocen a Joselu, mejor. Aquella generación que lloró la pérdida de nuestro gran imperio y qué murió desilusionada porque la muchedumbre española era incapaz de adaptarse a los iconos culturales de Europa, ahora alucinarían. Aquellos que sintieron frustración porque nuestro territorio no adquiriría la agudeza europeísta.. Al final, ...nada, ...puta mierda. Europa demanda Joselu´s y Joselu´s aquí tenemos un montón. Lo hemos conseguido. Al final no será necesario darles por el culo con Lorca, Cervantes o Gómez de la Serna. Joselu y su cristal a un magnifico precio nos es suficiente. Volveremos a imperar en el mundo. ¿Qué mayor imperio puede ser un lugar en el que todo el mundo desea desahogar libremente y sin impunidad sus impúdicas perversiones? Llegamos a la conclusión a la sombra de Embajador Vich número siete. A la saturación musical, llegaremos más tarde. A la mierda, mañana. ¡Alas!, alas necesito para volar y llegar a Ruzafa...

Recorro Embajador Vich entre prostíbulos habitados por ex jugadores de fútbol , periodistas de Canal 9 y perseguidores de lo viciado. Apresuro por Rinconada Federico García Sanchiz. Y ahí está... El Palacio Marqués de Dos Aguas. Que belleza. Y que extraño. Dos grandes figuras humanas esculpidas para le eternidad que representan al Jucar y al Turia. El primero olvidado y el segundo vacío. Hay que joderse. Curioso. En apenas pocos metros cuadrados encontramos el pasado, presente y futuro de la ciudad de Valencia. Una adolescencia con inclinaciones hacia el rococó y que ahora en su madurez se flagela con putas del este, modernismo barato y como compañero inseparable y consejero cultural tiene al omnipresente Joselu. Todos creían que iba a ser una gran ciudad y mira tú en lo que se ha convertido. Su máxima aspiración cultural ahora mismo aspira ( si si ...aspira ) a conocer como cortar el cristal de “buenri” del Joselu.. Y su futuro está vacío, como su río.

Continuará...

No hay comentarios:

Publicar un comentario